jueves, 30 de octubre de 2008
Un poco de Science Fiction
viernes, 24 de octubre de 2008
I am from Thirty Three, o, yo soy de Treinta y Tres
Pues así fue que encontré dos veces la misma aguja en el pajar mas grande del planeta, el océano. La costa turca regala paisajes mediterraneos en toda su extensión. Un distintivo de esta área son las enormes goletas de madera que surcan en toda dirección. Se pueden ver los astilleros artesanales en plena campiña y otros mas sofisticados en las costas de Bodrum y mas arriba.
La demanda de goletas especialmente por turistas europeos y americanos es grande. Recorrer las costas como un Pasha es parte del programa turístico que vende este país.
El puerto de Dacta recibe gran cantidad de estas goletas. Miles de toneladas ambulando en los muelles, entrando y saliendo en forma constante, cambiando tripulaciones y gente entre medio de una ruidosa avenida principal que hace del puerto un entorno medieval.
Pues aquí llegamos nosotros. Con un viento de p...madre y en contra. Entramos en la bahía a velocidad de misil y comenzamos a esquivar goletas de 100 toneladas que a su vez esquivan goletas de 200 toneladas mientras todos buscamos un hueco en el atestado muelle del puerto. En la tercera virada Ticho divisa un espacio de media manga (mitad del ancho del barco). Es cuestión de emplear el método supositorio y penetrar allí sin resentimientos de ninguna especie.
La orden no se hace esperar. Nos aprontamos para atracar y hacia allí dirigimos la proa del barco. Nuestro objetivo: El espacio entre una goleta y un crucero de lujo. Las tripulaciones de ambos barcos leen nuestra maniobra y comienza la carrera de los fenders (protectores inflables que se colocan a los costados de la embarcación para evitar el choque con el casco vecino). Los van instalando de proa a popa en toda su extensión. Un tripulante de caba barco queda con uno en la mano para ubicarlo en el lugar de un posible impacto a la hora del atraque.
Nosotros también tenemos nuestras lanzas y escudos y cual jinete con coraza nos desplazamos rápidamente en busca de ganar la contienda.
Y llegamos entre medio de ruido de las maniobras. Gritamos en ingles, en griego en turco mientras los cabos pasaban de un lado a otro. El ultimo metro lo cubrimos con la ayuda de una persona que se prestó desde el muelle y que una vez amarrados con seguridad pregunte de donde es. Im from Uruguay, Im from Therty Three...soy uruguayo de Treinta y Tres.
Bueno... ¿sin palabras no?
Miguel es de Treinta y Tres. Radicado en España hace muchisimos años, y

"Conversaciones en el Cockpit", algún progama que me encantaría armar en algún momento, seria el marco adecuado para proyectar la experiencia de los aventureros y el conocimiento personal de cada uno. Al ser olimareño el entrevistado, digo así porque lo bombardeamos con tantas preguntas, es amena su forma de contar los cuentos. Sumenle a esto su larga estadía en España que ha generado un acento canario gallego que si no lo conocéis, imposible imaginarlo.

Nadine y Cynara consultando sobre tecnologias de navegacion para el proximo viaje a Australia.
"Conversaciones en el Cockpit con Miguel de Treinta y Tres"
Filmado en el Cockpit > Oprima Play
Miguel de Treinta y Tres y sus 10 anhos dando la vuelta al mundo.
Casi un mes despues de este encuentro, comentabamos con Ticho, Ethan y Paul en el cockpit, mientras navegabamos rumbo a Bozburum, que la probabilidad de encontrar un uruguayo de Treinta y Tres que se haya dado la vuelta al mundo en estas latitudes es de 1 en 1oo millones, por lo que tendremos que esperar varias vidas y ver si el planeta resiste tantas generaciones. La cuestion es que llegados a Bozburun y otra vez en la maniobra de atraque, nos extienden una mando para amarrar... pueden adivinar quien era?
...
LAS GOLETAS QUE NOS ACOMPANAN EN NUESTRO VIAJE


Una de las tantas goletas que surcan estos mares. Las fotos dicen mas de lo que yo pueda describir, o sea que las palabras aqui estan realmente sobrando.



jueves, 2 de octubre de 2008
Turquia Turquesa
Partimos dejando un poco de nosotros, como suele ser. Los tramites respectivos en la aduana de Herzeliya mientras el viento se acomodaba a su antojo y muy independiente de nuestra circunstancia.
En la oficina de pasaportes, podiamos ver el mar silenciado a traves de los cristales y varias banderas flameando nos indicaban que el viento iba en aumento a buen ritmo.
Sellos en nuestros pasaportes nos dan la autorizacion para levar anclas. Pasamos la escollera de piedras y lentamente comenzamos a dejar Herzeliya y Tel Aviv por la popa.
Nuestro curso apunta a Finique, en Turquia, dejando por estribor a Chipre a escasas 20 millas. No haremos escala ahi pero es bueno tenerla cerca por cualquier apuro.
El viento se ha establecido del sur y nos empuja en buena direccion. La embarcacion navega con brios a pesar de toda la carga que hemos recolectado en la ultima semana, incluyendo 300 botellas de agua de 2 litros... por aquello, como decimos en Uruguay.
Ethan se acomoda en la popa y deja su mano rozar la estela. Lleva su musica a todas partes y esta vez no ha sido la excepcion. Cierra los ojos pero mas que dejar libre albedrio a la imaginacion la intencion es meramente dormir y descansar. Es
Lentamente nos vamos preparando para la primera noche. Las guardias estan organizadas, por lo menos en la teoria.
La embarcacion cuenta con un timon automatico electronico. Lo importante es verificar que el rumbo sea el correcto, es decir, que el timon automatico cumpla su funcion, acomodar las velas a la direccion y fuerza de viento y controlar que no nos econtremos en lineas de colision con nadie, especialmente cargueros pesados.
Cada tripulante tiene ademas alguna "especializacion" y se pone a disposicion dentro y fuera de las guardias.
La noche se acerca y sabemos que una gran luna llena nos acompanara en la guardia desde la estela del barco.
Y si, vino la luna y mi guardia en la que participo hasta el perico embalsamado de Ian. La estela desdibujaba la figura de la luna, juagaba con ella y no se que mas le hubiera hecho de no haber cambiado el rumbo. El viento, mas o menos como las suegras, se puso en contra y no hubo entreacto sabroso ni recreo de cinco minutos para disfrutar de una veleada sin escoras. Prendimos motor, cargamos baterias y agua para cafe. Ian y Lua en su dormitorio juegan a algo y no les afecta el movimiento del barco. La cara distendida de algunos cambio un poco cuando la sesion se puso mas movida. Quedo claro que el balde paso a ser una de las mejores inversiones que se desquito rapidamente a bordo. Se uso un promedio de 2 veces por personas multiplicado por 10 en periodos de cinco minutos, es decir 20 veces calculado a valor de desquite..mmm..digamos....un promedio de .004 centavos del American dolar. Buena inverision no?
El viento comenzo a cesar cerca de las 5 de la manhana por alguna instruccion del mas alla, porque luego salio el sol con mucha fuerza y de muy poco humor... muy caliente. Se ve que hubo alguna discusion en la trastienda espacial. Las velas aplaudian. Suelen hacerlo cuando hay poco viento y las olas juegan con el barco. Los animos se perplejan un poco y buscamos alguna actividad para entretenernos. El horizonte esta completamente redondo y no se visualiza nada en toda su circularidad. Demasiada perfecta y no se como nuestros antepasados no se daban cuenta de semejante redondes. El dia pasa sin novedades. El ambiente cambia los habitos y ya tenemos a dos asiduos lectores que devoran paginas de libros y se alejan de nosotros. Es decir, entran en su propio circulo y viven al ritmo de las letras y no de las olas y el viento, que se convierte en algo secundario. Concentrados en sus rincones, Ticho y Cynara entran en trance literario agudo... y asi seguiran por los proximos dias, semanas, meses, de no haber sido que el viaje fue mas corto. Noche del tercer dia. No es que los vientos nos hayan dado alguna tregua pero comenzamos a acostumbrarnos a la arritmia del mar. Apenas se visualiza Chipre a estribor entre la neblina mediterranea tipica de la zona. Que la causa? busquen en Internet alguna respuesta. Yo no tengo idea y no tengo la minima curiosidad de saber el porque. Me gusta el misterio de lo que veo y mientras menos lo intelectualizo mejor * y a mas ignorancia, menos contaminacion*.
Otra vez la noche y con ella la luna anorexica aparece cada vez mas empequenecida. La estela, como los perros de raza inquietos e insoportables sigue ejecutando el mismo juego de siempre. Otra vez mi guardia pero con muy poca gente en el cockpit. Pasada la primera etapa del primer dia de navegacion, todos estan menos ilaracos y ya se dan el gusto de dormir en los camarotes. En definitiva las circunstancias psicologicas de las actitudes que reaccionan de similar manera a los eventos del viaje, me dejan literalmente abandonado en el cockpit. Hago fuerzas para sujetar los parpados, pero no se de donde engancharlos. El horizonte sin novedades. Un cielo empapado de estrellas y cabeceo hasta quedar dormido por decimanovena vez. Cada vez que me despierto miro el reloj y el tiempo esta ahi para quedarse toda la noche. Pasa un siglo y el horizonte se alcara, se va la luna, el mar se tranquiliza, no hay estela y yo tengo ganas de un cafe triple. Ahora que Ethan me releva en la guardia y puedo dormir, se me va todo el suenho acumulado como en alcancia durante la noche.
Hoy, cuarto dia de navegacion.
Deberiamos divisar la costa Turca en cualquier momento.
Al fin...comienzan a dibujarse montanhas en el horizonte. Un velero amarillo fuerte nos acompanha desde lejos y aunque la palabra que mencionare suene un poco estrambotica en este medio, nos inunda una fuerte alegria. Estamos arribando a Finike!!
miércoles, 1 de octubre de 2008
Cynara, Nadine, Ethan y Lorena
Finike es la escala ideal y la distancia mas corta cuando se navega desde Tel Aviv. Llegar a ella tras tres o cuatro dias de navegacion es un respiro.
La gente es muy cordial en esta zona y el ritmo de vida respeta la sinuosidad de las montanas que circundan esta ciudad. Como sera en invierno?
Comida clasica de Finike. Sobre todo mucho queso de cabra.
Osturuk Marin, repuestos para barcos
Y mas cosas para guardar...
Practicamente ocupaba el lugar de otra persona y a la hora de viajar era de lo mas dificil de estibar. Si se ponia a proa perjudicaba visualizar el camino y a popa no dejaba paso a maniobras practicas. Cuando el viento la llevo fue una especie de alivio. Liberen a Lady Black y alli se iba sin posibilidad de rescate de nuestra parte...al fin..
Pero no... una embarcacion no muy lejana, lanza su auxiliar a motor y sale en busca del rescate.
Vuelve Lady Black... los ninhos le agradecen con saludos... yo entredientes...
Al final confieso que un poquititito la extranhe..sentimentalismo de la edad...que se yo...aqui esta de nuevo con nosotros...
Only one dollar...just one dollar
Cynara debe ser el turista un millon que pasa por ella... El barco amarrado en los muelles de uno de los restaurantes de Kekova.
Desde ellos te llaman invitandote a atracar. A cambio de comer o beber algo en el restaurante la costumbre es darte agua y electricidad.
A medida que te acercas a la isla, desde los muelles, el anfitrion del restaurante comienza el ballet de la invitacion.
Suben las manos altas, levantan los talones y luego hacen un ademan de invitacion bajando el brazo y senhalando al restaurante.
El rostro siempre enfoca hacia la embarcacion, baja un poco y todo el movimiento se repite nuevamente.
Escaleras rodeadas de alfombras turcas.
Pequenhos mercados se esparcen por toda la isla. Uno se da cuenta de que no esta tan alejado de la civilizacion cuando observa los carteles de VISA o DINERS en varios de los angulos del negocio.
Lady Blue atracado en uno de los muelles de Kekova.Una de las paradas mas agradabes que hicimos en Turquia. Aqui tomamos un cafe de verdad y nos encontramos con Filipa. Su barco esta en el margen superior izquierdo de la foto
Nadine y Lorena y Coca Cola mediante.
Andrea esta pensando en viajar a Brasil haciendo justicia a su filosofia, vivir en Verano permanentemente.
Luego nos dara sugerencias de que bahias tocar.
El mejor invento despues de Windows segun Ethan.
Desde Marmaris a Bodrum. Por primera vez vemos nubes jugando en las montanhas que se adentran en el mar. Es un cruce muy agradable y lleno de energia.